Desde el mes próximo, jubilados, pensionados y beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH) tendrán un aumento del 11,83% y, a partir de junio, un incremento del 10,8%. La medida también alcanza a las asignaciones familiares y a aquellos que cobran pensiones no contributivas.
Se estima que esta suba, que en promedio es del 23,9%, será mayor a la inflación del primer semestre, una buena noticia teniendo en cuenta los 19 puntos de pérdida salarial sufrida por este sector el año pasado.
Durante el 2018, jubilaciones y prestaciones tuvieron un incremento del 28,46% frente a una inflación que terminó en torno al 47,6%. De acuerdo al Relevamiento de Expectativas de Mercado (REM), que realiza el Banco Central a partir de consultoras privadas, la inflación debería reducirse en los próximos meses. De este modo los beneficiarios recuperarían parte del poder adquisitivo que perdieron el año pasado.
Según la Anses, la “movilidad” engloba a más de 17,8 millones de personas:, 6,9 millones son jubilaciones y pensiones, 1,7 millón de Pensiones No Contributivas y Pensiones Universales para el Adulto Mayor y alrededor de 9,2 millones de asignaciones por hijo.