Argentina contará con un nuevo Parque Nacional en la provincia de Córdoba al aprobar este jueves el Senado la cesión al Estado de los bañados del Río Dulce y la Laguna de Mar Chiquita, o Mar de Ansenuza, un predio de 475.477 hectáreas que incluye una amplia área de humedales.
Además, la Cámara Alta aprobó la transferencia de jurisdicción de la provincia de Entre Ríos al Estado Nacional de un inmueble ubicado en la ciudad de Diamante, designado como Parque Nacional Pre-Delta, con lo que se amplió ese predio para la instalación de los guardaparques.
En la misma sesión, los senadores aprobaron y giraron a Diputados la creación del Parque Nacional y reserva Nacional Laguna El Palmar, de la provincia de Chaco y la aceptación de la cesión de inmuebles para la creación del Parque Nacional Aconquija, en la provincia de Tucumán.
El nuevo Parque Nacional Ansenuza eran terrenos de la provincia de Córdoba que pasaron al Estado y que cuentan con una superficie aproximada de 475.477 hectáreas, el cual comprende los humedales de los bañados del Río Dulce y la parte norte del espejo de agua de la Laguna de Mar Chiquita o Mar de Ansenuza y está ubicada en los departamentos Río Seco, Tulumba y San Justo.

En el caso de El Palmar, se trata de una superficie aproximada de 5.600 hectáreas conformada por los inmuebles de propiedad del Estado Nacional, ubicados en el departamento Bermejo del Chaco, mientras que el Senado aceptó la cesión de jurisdicción realizada por la provincia de Tucumán al Estado sobre 9 inmuebles que integrarán el Parque Nacional de Aconquija.
Sobre el Parque Nacional (PN) Pre Delta, ubicado sobre la ecorregión Delta e islas del río Paraná, en Entre Ríos, celebró ayer la sanción de la ley que le otorga jurisdicción sobre unas 146 hectáreas para poder ampliar el territorio con ambientes diferentes, con la posibilidad de desarrollo de nuevos senderos y actividades y asegurar que esté abierto todo el año.
Se trata de dos espacios no insulares conocido como el campo Coronel Sarmiento, con una barranca y una zona de campos altos, que se protegerán de los incendios ocurridos en los últimos años.