El presidente prevé visitar la Base Marambio el 5 de enero junto a Rafael Grossi, director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA)
El presidente Javier Milei visitará la Base Marambio en la Antártida argentina el próximo 5 de enero, si las condiciones climáticas acompañan la agenda oficial, para respaldar un programa de control de contaminación del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) de las Naciones Unidas.
La OIEA es la entidad de las Naciones Unidas para la articulación de los intereses de los principales países que incursionaron en el territorio de la energía atómica. En la actualidad, América Latina es el único bloque que no tiene armas de destrucción masiva.
El jefe de Estado decidió viajar a la base argentina tras recibir en Casa Rosada a Rafael Grossi, director de la OIEA.
Milei iría acompañado por la canciller Diana Mondino, el ministro de Defensa Luis Petri y Grossi.
Los viajes a la Antártida que realiza la Fuerza Aérea salen desde la base de Santa Cruz a bordo de un Hércules si el clima es propicio, ya que en la zona cambia muy rápidamente y no puede preverse con anticipación.
Se espera que Milei viaje a la provincia sureña, pase allí la noche y si el viernes las condiciones son favorables volará a la Base Marambio.
Durante el encuentro con Grossi, Milei escuchó los pormenores de la agenda global y la regional, y el interés de la ONU en un proyecto de control de contaminación en la Antártida.
En paralelo, Naciones Unidas lleva adelante un plan similar en el Ártico.
La Antártida es clave para el planeta porque contiene cerca del 80% del agua dulce y puede influir en el cambio climático.
Este viaje del presidente al continente blanco resulta esperanzador, debido a que antes de su asunción, Milei desconoció el cambio climático y dijo que era un «invento del socialismo».