El caudal de agua que se acumuló en Buenos Aires en las últimas horas debido a las copiosas lluvias, obligó a reprogramar la Superfinal de la Copa Libertadores entre Boca y River.
Una lluvia torrencial con fuertes vientos se abatió sobre Buenos Aires desde el amanecer de este sábado y muchos se preguntaron si las condiciones climáticas permitirían que se juegue el Superclásico Boca-River por la ida de la final de la Copa Libertadores de América.
Las calles de los alrededores de La Bombonera, se anegaron a medida que la lluvia caía desde poco antes de las siete de la mañana y a seis horas del inicio del histórico encuentro, el césped aparecía con grandes charcos.
En efecto, en estos momentos tiene lugar una reunión de los dirigentes de la Superliga que intentan rearmar la fecha 12 del torneo.
De acuerdo con la información publicada a través de las redes sociales por Daniel Angelici, presidente de Boca, y también por la Conmebol, el partido se trasladó para mañana domingo a las 16.
De todas maneras, resta esperar la conclusión del encuentro. Mientras que a las 19 habrá otra reunión entre Rodolfo D’onofrio, presidente de River, Angelici y la Conmebol.
Los futbolistas, en tanto, continúan concentrados aguardando la resolución.