El intendente Martín Llaryora recorrió el viernes el sector donde máquinas y obreros trabajan para dar solución a un viejo reclamo de los vecinos. Dicha obra consiste en la reconstrucción del desagüe pluvial que tiene dos bocas de tormenta a cada lado de la calzada, en ese lugar se ejecuta la conexión con los caños de 600 mm de PRFV.
La realización de esta obra beneficiará a miles de vecinos de los barrios Renacimiento y Acosta, ya que se lleva a cabo sobre calle Ramos Mejía, la cual marca el límite entre ambos barrios en su intersección con calle Matheu.
El subsecretario de Infraestructura municipal, Juan José Tuninetti, dio detalles de los trabajos: «Hoy estamos rehaciendo el desagüe pluvial que estaba sin comunicación entre las cámaras y el desagüe principal. No había caño, en su lugar había tambores de chapa de 200 litros que estaban totalmente tapados y destruidos».
Durante la recorrida, el intendente municipal recordó: «Hace unas semanas estuvimos en este barrio entregando material para prevenir el Covid-19, en esa recorrida los vecinos nos plantearon que desde hace 15 años tenían este desagüe inutilizado. Nosotros tomamos el pedido, le dijimos a los vecinos que en pocos días íbamos a volver y hoy estamos acá, esta es la nueva Córdoba que vinimos a hacer para que todos los barrios también tengan posibilidades».