El encuentro culminó 2-1, derrota para el conjunto albiceleste. El partido fue interrumpido por agresiones de parte de los simpatizantes marroquíes hacia los jugadores argentinos, luego de un gol que una hora y media después, fue revisado y anulado por el VAR
A las 10 horas de este miércoles comenzó el debut de la Selección Argentina Sub-23 en los Juegos Olímpicos 2024, con su par de Marruecos. En el primer tiempo el combinado marroquí pudo sacar ventaja y convertir el primer gol del encuentro. En suma, minutos después del inicio del complemento, la defensa argentina cometió un penal, que Rulli no pudo evadir y la jugada terminó sentenciando el 2-0 parcial.
A los 23 minutos del segundo tiempo Giuliano Simeone logró convertir, descontando la diferencia en el marcador. Durante esta mitad del partido los minutos perdidos fueron demasiados. Razón por la que el árbitro sueco, Gleen Nyberg, decidió adicionar 15 minutos. En la última jugada, Argentina logró igualar luego de una serie de rebotes dentro del área, que terminó con el grito de gol de Cristian Medina, tras un cabezazo que envió la pelota al fondo de la red. Fue anulado una hora y media más tarde, el partido se retomó sin público en el estadio, tras una serie de papelones y decisiones poco claras.
Javier Mascherano: «El circo más grande que vi en mi vida»
El partido parecía terminado luego del empate, cuando los simpatizantes del equipo africano comenzaron a agredir con proyectiles a los jugadores argentinos. La situación se tornó más insegura cuando desde la tribuna arrojaron pirotecnia hacia las inmediaciones del banco de suplentes encabezado por Javier Mascherano. Situación que culminó con los jugadores huyendo al vestuario.
Si bien el partido no había terminado por sus medios tradicionales, se esperaba que la decisión del cuerpo arbitral y de la organización de los JJOO fuera cerrar el encuentro con el último resultado que mostró el marcador. La decisión demoró en llegar, los guardias del estadio comenzaron a dirigir al público hacia el exterior, los medios oficiales de la competencia mostraban al partido como terminado; hasta que se dio a conocer la decisión final, mínimamente polémica y absurda.
El árbitro revisaría la jugada del segundo gol argentino, por una presunta posición adelantada. En caso de convalidarse el gol, el encuentro terminaría, pero de anularse, se jugarían 3 minutos más. Las sospechas indicaban que la decisión de Gleen Nyberg ya estada tomada, el gol sería anulado y se retomaría el partido. Así sucedió.
Una hora y media más tarde, los equipos salieron al campo de juego, sin hinchas en el estadio, para realizar una entrada en calor que terminó siendo más larga que los minutos de juego que restaban. Posteriormente, el árbitro revisó, anuló el gol de Cristian Medina y el partido se reanudó con el 2-1 parcial, a favor de Marruecos. Resultado que tras algunas jugadas más, se convirtió en definitivo y en un debut con derrota, polémica y bronca para la Selección Argentina Sub-23.
«El circo más grande que vi en mi vida», fueron las palabras que se escucharon decir a Javier Mascherano. Con un estadio completamente vacío, las voces de los protagonistas se entendían a la perfección.
