El jefe de Estado y la vicepresidenta, Victoria Villarruel fueron invitados a subirse a un TAM 2C-A2 que circulaba sobre la Avenida del Libertador, desde donde saludaron efusivamente a quienes acompañaron el desfile
Tras la firma del Pacto de Mayo en Tucumán, en la madrugada de este martes, el presidente de la Nación, Javier Milei, regresó a la Ciudad de Buenos Aires para participar en los actos del 9 de Julio.
Durante la mañana, el mandatario encabezó el Tedeum en la Catedral Metropolitana. Luego, Milei y su Gabinete se trasladaron al desfile militar que inició a las 10.30 en el cruce de la Avenida Libertador y Agüero, en la zona del Museo de Bellas Artes, y se extendió por toda la avenida hasta Olleros, en las inmediaciones de la estación de tren Lisandro de la Torre.
El palco principal estuvo ubicado a una cuadra del inicio del desfile, en Libertador y Austria, sobre la plaza República Oriental del Uruguay.
Desfilaron unos 7.000 efectivos. Participaron, además, decenas de camiones, tanques, aviones, vehículos militares, de la Policía de la Ciudad, de las tres fuerzas de seguridad de la Nación, Prefectura, Gendarmería, PSA, Policía Federal, bomberos y brigadas motorizadas.
El tránsito en la zona permanecerá interrumpido hasta las 15.
El momento en que Javier Milei y Victoria Villarruel suben a un tanque de guerra en el desfile por el 9 de Julio
El presidente Milei, y la vice, Victoria Villarruel, se bajaron del palco oficial para subir a un tanque de guerra, en medio del desfile militar por el Día de la Independencia. Con ayuda de oficiales treparon al vehículo para saludar al público y generar la adhesión de los vecinos presentes. Recorrieron una distancia menor a una cuadra y el Presidente ayudó a su vice a descender. Ambos regresaron al palco fuertemente escoltados.

Villarruel finalmente participó del desfile militar por las ciudades porteñas, así como también del Tedeum en la Catedral Metropolitana, tras haber faltado anoche a la firma del Pacto de Mayo en San Miguel de Tucumán, debido a una gripe severa.
«Esperamos que pueda quedarse hasta el final», decían cerca de la vice en la previa, en alusión a su fuerte estado gripal. Pero, ella presenció todo el desfile, animada por la escena.
